La polémica viene creciendo en Alemania con los cambios internos que vive Bayern Múnich en las últimas semanas. La llegada de Oliver Kahn y todo su cuerpo de trabajo al Allianz han abierto una guerra con el primer equipo, donde los grandes jugadores piden millonarias sumas para continuar en el proyecto del rey de la Bundesliga. Europa espera sacar provecho en los mercados que vienen.
Para entender esta historia hay que devolvernos hasta el pasado mes de enero, donde el representante de David Alaba Pini Zahavi, aseguraba que no esperaría más al Bayern y que su jugador estaba en el mercado. Solo unos días después el austriaco firmada con Real Madrid a coste cero generando una fractura entre el departamento deportivo del club y varios de sus pesos pesados.
Bild afirma que la salida de Han Flick por sus problemas con Salihamidzic (director de fútbol) pegó fuerte en los jugadores, quienes de la mano del nuevo DT de la selección alemana conquistaron un histórico sextete en apenas 12 meses. Si bien la llegada de Julian Nagelsmann habría caído bien en grupo, las estrellas del Bayern solo aceptarían continuar en Múnich bajo unas millonarias renovaciones que les hagan olvidarse de sus roces con la dirigencia.
Un directiva con puño de hierro
Los casos más puntuales son los de Kingsley Coman y Robert Lewandowski, quienes también son representados por el israelí Zahavi. Durante semanas Bayern se ha encontrado con peticiones de 13 millones de euros por parte de dos jugadores cuyo contrato finaliza en junio de 2023.
Sumado a esto, Bild marca que tanto Kahn cómo Salihamidzic no tienen en sus planes ceder ante las presiones de los futbolistas. Queriendo marcar una línea de mando claro y contundente, la dirección deportiva del Bayern habría hecho llegar a oídios de los jugadores que si quieren marcharse de Múnich ahora mismo, tendrán que traer 90 millones de euros. Guerra interna por el control del rey de la Bundesliga.