A Manchester United le cuesta aún poder cambiar la cara que supo mostrar durante la temporada, pero al menos consigue los resultados que necesita. Este sábado triunfó en casa de Norwich con un gol de penal de Cristiano Ronaldo, para llegar a su séptimo gol en esta Premier League. Así continúa el invicto de Ralf Rangnick.

Norwich hizo mejor las cosas que Manchester United, pero la victoria se la quedó el visitante, luego de una ‘tonta’ falta de Max Aarons que derivó en el penal que convirtió CR7. A Rangnick todavía le cuesta imponer el estilo de juego que pretende, pero al menos los ‘Diablos Rojos’ siguen en la pelea por llegar a las copas interncionales de la próxima temporada.

Un trabajo defensivo muy eficiente del conjunto local evitó que el ‘United’ pudiera ocasionarle alguna ocasión clara en los primeros minutos. Y de contraataque, Norwich tuvo algunas aproximaciones que hicieron preocupar a De Gea. Sin embargo, algunas malas decisiones en tres cuartos evitaron que realmente hubiese un gol en Carrow Road.

Recién al final del primer tiempo se pudo ver algunas buenas jugadas de los ‘Diablos Rojos’. Cristiano Ronaldo tuvo un remate de zurda que forzó a una gran atajada de Tim Krul, mientras que en la última, un cabezazo poco convencional de Maguire obligó al neerlandés a otra brillante intervención.

La segunda parte no modificó el trámite del partido. Norwich seguía jugándole de igual a igual a su rival y tuvo una clara con un gran disparo de Pukki, que obligó a una monumental volada de De Gea para evitar la apertura del marcador. Minutos después, un susto en el campo de juego producto de un malestar que sufrió Victor Lindelof, quien hasta se tocó el pecho. Fue reemplazado y fue directamente al vestuario para ser atendido y evitar cualquier mal cardíaco.

Finalmente, al minuto 75, un centro de McTominay buscaba a Cristiano, pero Aarons le impidió cabecear y el árbitro Darren England marcó penal. El propio Cristiano Ronaldo se encargó de la ejecución y la clavó junto a un palo para vencer a Krul, que se tiró al otro. El 1-0 le hacía justicia a la gran jugada que tuvo el luso en el primer tiempo y evitó el neerlandés, pero no así en cuanto al juego donde los de Rangnick todavía están en deuda.

Tras el tanto de penal, Cristiano tuvo una nueva chance para aumentar ventajas, pero increíblemente la mandó afuera. En tanto, Norwich obligó a otras dos buenas atajadas de De Gea para evitar el empate, por lo que se quedó con las manos vacías y sigue en el fondo de la tabla. Manchester United, así, se quedó con un buen triunfo de visitante, aunque debe mejorar.