Durante la semana, Vinícius Júnior estuvo en el ojo de la tormenta para una parte del mundo del fútbol. Los clásicos festejos de baile de delantero brasileño destaparon malestar en algunos actores del medio, pero también despertó infinidad de declaraciones a su favor.
Con el duelo ante Atlético de Madrid en el Cívitas Metropolitano por delante, se le prestó atención al atacante de la Canarinha, que sostuvo previamente que seguiría celebrando de aquella manera para combatir al racismo de los que critican sus formas.
En 18 minutos de la primera parte, Real Madrid se puso en ventaja y los jugadores tuvieron la posibilidad de manifestarse con un baile. Aurelién Tchouaméni le entregó un pase picado a Rodrygo y el brasileño definió de sobrepique para el 1-0.
Para acompañar a su compatriota, corrió hacia un córner y lo esperó para bailar una samba en provocación a la ola de críticas y para darle solidez al mensaje anti racismo. Mendy y el autor de la asistencia los miraron de cerca con sus manos en la cintura para apoyarlos con el mensaje.