Mientras Barcelona se mantiene con diferencia en la cima de LaLiga, el culé se disputaba este miércoles el boleto a la final de la Copa del Rey ante Real Madrid. En la ida, en la capital española, los comandados por Xavi Hernández habían ganado por la mínima y buscaban cerrar la historia como locales.
Osasuna ya esperaba en la final tras haber dominado la serie ante Athletic Club y esperaba en la gran definición por uno de los grandes del certamen. En el Camp Nou, el blaugrana comenzó manejando los hilos del partido, pero fue el Merengue el que consiguió la primera ventaja.
En el primer minuto de adición de la primera parte, los de Carlo Ancelotti se aproximaron al área rival con peligro y Vinícius Júnior remató al arco tras un rebote. Un desvío desaceleró a la pelota y Karim Benzema llegó a puntearla, pero ya había cruzado la línea.
Así, el delantero brasileño anotó el primero ante el Barça y se acercó a los hinchas de Barcelona marcándose el pecho en un claro gesto de provocación, mostrando el escudo de campeones del Mundial de Clubes, algo que había hecho Cristiano Ronaldo en el pasado.