Una falla de la seguridad del Philips Stadion sobre el final del partido entre PSV y Sevilla por la UEFA Europa League produjo un verdadero escándalo. El arquero Marko Dmitrovic fue agredido por la espaldapor un aficionado del conjunto neerlandés al invadir el campo de juego. Sin embargo, el internacional serbio redujo a este espontáneo hasta que apareció efecitvos de seguridad para llevárselo. Pese a esto, el partido continuó como si nada hubiese ocurrido.
El partido iba 1-0 en favor de PSV Eindhoven (gol de Luuk de Jong) en tiempo de descuento. A esas alturas, los de Ruud Van Nistelrooy debían anotar dos goles más para igualar la serie(los sevillanos ganaron la ida por 3-0). Sin embargo, la impotencia del público y los futbolistas llevó a que la situación se descontrole en el Philips Stadion.
Sobre el minuto 93 de juego, el partido se interrumpió y las cámaras de televisión no mostraron lo que estaba sucediendo. Sin embargo, por reportes de algunos periodistas españoles en el estadio se supo que el arquero Marko Dmitrovic fue agredido por un espontáneo que invadió el campo. Afortunadamente, nada pasó a mayores, ya que el serbio logró reducir a este aficionado que lo había golpeado por la espalda.
El propio Dmitrovic controló con su fuerza que el aficionado se escape. Inmediatamente, jugadores de PSV y Sevilla llegaron para tratar de ayudarlo ante esta situación. Luego, llegaron los efectivos de seguridad para llevarse a este espontáneo. Lo llamativo es que el árbitro Daniele Orsato decidió que el partido continúe como si nada hubiese ocurrido.
PSV pudo anotar otro gol de la mano de Fabio Silva para poner el partido 2-0 y quedar a un gol de la prórroga. Pero se quedó sin tiempo. Orsato marcó el final en medio de una gran protesta de los futbolistas del equipo neerlandés, quienes creen que debía jugarse más tiempo por la agresión ocurrida con Dmitrovic.
Así le quedó el cuello a Dmitrovic tras la agresión: “Tenía ganas de pegarle”
Tras el partido, Dmitrovic atendió a la prensa donde se pudo constatar la agresión de este aficionado contra él. Se pudo ver cómo el cuello tiene una herida muy leve, pero que demuestra que el espontáneo tuvo intenciones de atentar contra el arquero serbio.
“Era ya el descuento. Vino un aficionado, me empujó por la espalda y luego se me puso de frente e intentó pegarme.Me rozó un poco la nariz y el cuello. Tenía ganas de pegarle pero eso no es bonito. Si te quieres pegar te apuntas a un deporte como el boxeo, el fútbol no merece estas cosas“, afirmó el propio arquero de Sevilla.