Este jueves en la Bombonera,Bocarecibió aBarcelona de Guayaquilpor la quinta jornada de la fase de grupos de laConmebol Libertadores. La victoria de The Strongest en la altura contra Santos le dio una mano enorme alXeneize, que debía apenas sumar hoy para quedar a un paso de los octavos de final.
Después del Superclásico del pasado domingo por la Copa de la Liga de Profesional de Fútbol, donde los de Miguel Ángel Russo jugaron tal vez su peor partido en el semestre, se esperaba ver a otro equipo con tal vez los ánimos renovados producto del mano a mano ganado. Bueno, eso no pasó.
En los primeros minutos de juego, Barcelona de Guayaquil exigió al máximo a Esteban Andrada, quien respondió de la mejor manera para salvar el arquero del dueño de casa. La defensa delXeneizevolvió a hacer desastres en el fondo y Jorman Campuzano, quien reemplazó a Alan Varela, fue de menor a mayor, aunque en el comienzo demostró por qué es suplente.
En el segundo tiempo, Boca tal vez se acomodó y estuvo más cerca del arco del equipo ecuatoriano, aunque tampoco lo exigió al máximo. La más clara fue de un centro que desvió un defensor rival y le quedó a Lisandro López con el arquero fuera de los tres palos. No obstante, el defensor central definió de primera y la pelota se fue por encima del palo.
El fiel reflejo del partido delXeneizefue una de las últimasjugadas en ataque de Boca, donde Edwin Cardona tuvo un tiro libre peligroso cerca del área, pero el remate dio en Agustín Almendra, quien se había dado vuelta y funcionó como defensor rival para despejar el peligro. Así, Barcelona clasificó a octavos de final y Boca depende de sí mismo, pero jugando así se debe replantear muchas cosas.