Tras cuatro años y medio de espera y con una ceremonia inaugural llena de historia y recuerdos mundialistas, comenzó a rodar la pelota en Qatar 2022. Un partido en donde, pese a que había un claro favorito, no se esperaba una actuación tan floja del dueño de casa luego de su preparación.
Campeón de la Copa Asia y con varios partidos ante selecciones sudamericanas y europeas, Qatar prometía buscar el batacazo en la primera fecha de la Copa del Mundo sacandole diferencias a la Ecuador de Gustavo Alfaro. Una idea que solo quedó en eso ya que poco pudieron hacer en esta primera noche de fútbol.
Avasallante desde el minuto uno, Ecuador salió con todo intentando sorprender a Qatar y lastimar de entrada. Estrategia que realmente surgió efecto ya que los sudamericanos lograron abrir el marcador con tan solo 3 minutos de juego. Un tanto que igualmente no fue convalidado por un leve offside del ecuatoriano.
Sin embargo, el equipo que volvía a los mundiales tras la ausencia en Rusia 2018 no se detuvo ahí y siguió yendo al frente. Una actitud con la que superaba ampliamente a Qatar desde el juego asociado y las pelotas largas al espacio, de afuera hacia dentro. Así llegaría una pelota larga en la que Saad Al Sheeb cometió un penal insólito para que Valencia convierta el 1-0.
Confiado y agrandado por el tanto, el equipo de Alfaro siguió atacando insistentemente para liquidar el partido tras la poca respuesta de los locales. Solo bastaron 15 minutos: nuevamente Valencia, con espacios, cabeceó solo dentro del área para liquidar el partido.
Con el partido sentenciado, podría decirse que los segundos 45 minutos estuvieron demás ya que las imprecisiones se mantuvieron en el local y le llegaron a los ecuatorianos. Sin grandes situaciones, a Ecuador le bastó con un tiempo para quedarse con la primera victoria del Mundial.
Relajado por un triunfo muy importante, Ecuador ahora deberá pensar en Países Bajos como un partido clave e histórico. A su vez, si de historia se habla, es importante remarcar que Qatar se convirtió en esta jornada de fútbol en el primer anfitrión que cae durante el partido inaugural.