La Primera B tiene esas historias que le gustan a la gente y Deportes Puerto Montt protagoniza un verdadero papelón en el ascenso del fútbol chileno. El equipo dirigido por Erwin Durán se jugó la vida para fichar al volante paraguayo Mario Otazú, quien viene con cartel tras haber actuado en Colón de Argentina.
El volante venía con tremendas recomendaciones y cartel. Es más, el equipo sureño lo presentó en sus redes sociales y hasta el presidente Germán Mayorga lo fue a buscar al Aeropuerto de Santiago como gran fichaje para salvarse del descenso. “¡Bienvenido Mario!“, escribieron en las redes sociales.
Sin embargo, Otazú escondía un gran secreto que fue revelado a las 24 horas de su fichaje: el jugador ocultó una reciente operación y, claramente, el club desistió de su contratación a un día de su gloriosa presentación en sociedad.
Tras el partido ante Osorno, el DT Erwin Durán dejó en claro que a Otazú “le falta tiempo de recuperación y nosotros no tenemos tiempo de espera”.Bolavip Chile indagó mucho más allá y con una fuente en Puerto Montt se enteró de más detalles.
Otazú llegó con una operación de meniscos a Chile y no avisó a la dirigencia del club. Al llegar a la práctica, Durán se dio cuenta que algo raro había por su forma de patear el balón. Ahí, rápidamente va al chequeo médico y se enteraron de su real estado físico. Al menos, le faltaba un mes para estar recuperado. “¿Estás operado?”, le preguntó el DT al paraguayo y ahí, recién, el guaraní reconoció su omisión. Todo se ratificó con los exámenes.
Mario Otazú llegó desde Guaireña de Paraguay. Su currículum tiene pasos por Olimpia y Sol de América. A ello se suma el fugaz paso por el Sabalero en Argentina. El volante desde abril que no jugaba y en Puerto Montt, al menos, conoció el Chinquihue y se devolvió por no decir la verdad.