El 12 de junio de 2011 será una fecha que quedará enmarcada en la historia grande de Universidad de Chile, toda vez que llegó al Estadio Nacional con un camión lleno de fe, pero con una adversidad palpable en la final de vuelta del Apertura 2011 frente a Universidad Católica.

El conjunto cruzado se había impuesto por 2-0 en la ida en condición de visita, por lo que le servían varios resultados para coronarse como campeón y consumar una frustración azul en un equipo que después terminaría siendo uno de los más recordados de la historia.

La U se puso en ventaja tempranamente y después vería como Lucas Pratto empataría el partido. En el segundo tiempo, la U simplemente pasó la aplanadora, ganó 4-1 y conquistó uno de los torneos más épicos de los que se tenga recuerdo.

La U terminó celebrando ese torneo. | Foto: Agencia UNO

Fue precisamente el gol de los cruzados el que tuvo como protagonista a Marcos González, ex jugador de Universidad de Chile formado en los azules y que, hoy por hoy, goza viendo a su hijo jugar en la Sub 17 de la U.

Corría el minuto 23 cuando una intrascendente pelota que se iba por el costado fue “reventada” con una pifia que terminó cayendo al centro del área. Ahí estaba Lucas Pratto, quien de primera golpea el balón y clava el 1-1 parcial que después no le sirvió de nada a la UC.

“Jajaá, esa jugada es una anécdota ya. Después del 4-1 y la pifia que me mandé, el gol da un poco lo mismo”, dijo Marcos González en exclusiva con Bolavip Chile recordando el momento de su macana.

Eso sí, el ‘Lobo del aire’ no le quiso restar mérito al delantero de los cruzados y de igual manera dijo que “Justó le quedó a Pratto, fue increíble. Fue golazo igual”, cerró.