Ha sido criticado en muchas oportunidades. Ha tenido partidos extraños, en donde sacaba pelotas imposibles pero tenía errores que le costaban caro a su equipo. Lo cierto es que Marcelo Barovero es un arquerazo.

A los 29 minutos, el argentino se lució con una atajada tras un remate desde lejos de José Madueña, que se había elevado mucho y caía por su espalda si no metía ese manotazo salvador.

Tan solo tres minutos después, el ex-River le tapó un mano a mano a Édgar Méndez, cuando todo el Estadio BBVA Bancomer presagiaba el primer gol del Cruz Azul.

Por ahora, Monterrey está venciendo por 1 a 0 a La Máquina con un golazo de chilena de Avilés Hurtado.

En gran parte, esta victoria parcial también es gracias a Trapito.