Muy complicada se puso la previa del duelo entre Independiente Santa Fe y River por la tercera fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores de América. El lamentable presente que se vive en Colombia, con manifestaciones constantes en la calle y violenta represión policial como respuesta, hizo que desde el Millonario decidan no viajar a Armenia, municipio donde se iba a disputar el encuentro.

Por ese motivo, desde Conmebol tomaron la decisión de que el duelo se juegue un día más tarde y en Paraguay, para asegurar que ambos planteles tendrán su seguridad garantizada. Claro, al conjunto local eso le da desventaja, porque su estadio está a 2.600 metros de altura, mientras que en Asunción ese factor que suele afectar a los rivales no estará presente. 

De igual manera, Harold Rivera, entrenador del conjunto de Barranquilla, se tiene fe y busca dar el gran golpe ante el equipo del Muñeco: "Será un partido duro contra un muy buen rival. Queremos volver a las victorias y enderezar el camino. Vamos a salir a sumar porque en la Copa todavía estamos vivos. El mensaje para la gente es que hay que seguir confiando y creyendo en el trabajo que estamos haciendo junto a los jugadores".

Luego, hasta bajándole el precio a uno de los semifinalistas en la edición pasada, dijo: "Es un rival complicado, con dos laterales que salen bastante al ataque y han hecho línea de tres en el fondo en los últimos partidos. Es un equipo de cuidado que hace buena presión tras pérdida, pero es vulnerable. No es imposible, es un rival atacable y esperemos que podamos hacerles daño con nuestro juego".

Y cerró: "Somos muy fuertes en condición de local y tuvimos que desplazarnos a otros estadios. Esto nos afecta, pero debemos acatar todo lo que está pasando y luchar por ganar los juegos. Nos toca viajar, sumar horas de vuelo. Teníamos todo preparado para disputar el partido en Armenia y ahora nos toca viajar para Bogotá y embarcar para Paraguay. Por temas externos, tenemos que pasar por este tipo de cosas".