En el Arena do Gremio, Brasil y Paraguay se enfrentaron por el primer partido de los cuartos de final de la Copa América 2019.

Aunque en los papeles pintaba para un encuentro muy disparejo, la primera parte terminó sin goles y la más clara fue para la Albirroja.

Una de las explicaciones por las el conjunto paraguayo aguantó el cero fue por el buen nivel de sus centrales. Principalmente, de Gustavo Gómez.

Pasados los veinte minutos, Paraguay se equivocó al salir del fondo, Roberto Firmino se iba solo ante Roberto Junior Fernández, pero el defensor apareció a toda velocidad para evitar el gol.

Sin dudas, uno de los puntos altos del equipo de Berizzo en esta Copa América.