Este sábado, Barcelona visitó al Osasuna con la necesidad de ganar para ver mucho más tranquilo el derbi madrileño de mañana, donde espera que Atlético Madrid pierda puntos o que ambos dividan unidades.

Después de una semana donde el club azulgrana selló el mejor partido de la era Ronald Koeman, el Barça confirmó su buen presente con un buen resultado, pero también con un buen rendimiento.

Casi a la media hora de juego, Lionel Messi asistió desde el círculo central a Jordi Alba, quien se fue mano a mano contra el arquero y le rompió el arco para el 1-0.

Nuevamente con una línea de tres centrales, Barcelona volvió a sufrir poco en una temporada donde en muchos partidos cada ataque rival era medio gol.

Ya sobre el final, Messi asistió ésta vez a Ilaix Moriba, quien enganchó y clavó un golazo de zurda para sentenciar el encuentro.

Así, Barcelona ganó y se puso a dos puntos del Atlético Madrid, que tiene dos partidos menos. Por su parte, Real Madrid quedó tercero a tres del Barça.