Después de que Zinedine Zidane decidió poner fin a su exitoso ciclo como entrenador Merengue, una suerte de maldición, materializada en un pedido común, ha puesto a tambalear al Real Madrid. Los futbolistas quieren irse y, en muchas ocasiones, a Florentino Pérez no le queda más opción que abrir las puertas de la Casa Blanca.

Primero fue Cristiano Ronaldo, con todo lo que su partida provocó. Después los croatas Luka Modric y Mateo Kovacic, este último a punto de cerrar su vinculación con Chelsea. Y ahora ha hecho el mismo pedido el portero español Kiko Casilla.

Con el belga Thibaut Courtois más cerca que nunca de llegar a Real Madrid, ya que no estuvo presente en el último entrenamiento del Chelsea y fue visto ayer mismo en la ciudad española de Tenerife, sumado a la llegada del joven portero ucraniano Andriy Lunin; Kiko Casilla, que ya venía siendo el relevo de Keylor Navas, cree no tener más opción que decir adiós.

Fue la Cadena COPE la que avanzó que el exportero del Espanyol de Barcelona planteó ya a los directivos el deseo de partir y que estos ya están trabajando en la búsqueda de un destino que convenga a ambas partes.