Hay dos futbolistas rusos que podrían lamentarse el resto de sus vidas por una decisión que tomaron este viernes, luego de que su seleccionado cayera de manera contundente ante Brasil en un amistoso.
Se trata de Roman Neustädter y Konstantin Raushfueron, que fueron sorprendidos a la salida de un club nocturno de Moscú tras el mencionado compromiso. Los jugadores fueron a bailar a pesar de la dura derrota.
La Federación Rusa decidió multar a ambos jugadores, que no habían viso acción en el amistoso, con una fuerte suma de dinero. Además, podrían perderse el Mundial "por violar las reglas de comportamiento y dañar la imagen del equipo".
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