El equipo de Arruabarrena goleó a Rosario Central por 3-0 en la Bombonera y se clasificó a los octavos de final de la Sudamericana. Chávez en dos oportunidades y Fuenzalida convirtieron los tantos de la resurrección xeneize. Poco a poco vuelve a ser el viejo Boca. La salida de Carlos Bianchi y el desembarco de Rodolfo Arruabarrena generaron el efecto que todos esperaban, el equipo enderezó su rumbo, remontó su pésimo inicio de campeonato y ahora dio el primer gran paso en la Copa Sudamericana. Es que después de igualar 1-1 en el partido de ida que se jugó en el Gigante de Arroyito, el conjunto de la Ribera goleó por 3-0 a Central en la Bombonera y se metió en la próxima fase del certamen con una actuación que afianza esa recuperación que tanto anhelaba su gente. Claro que en esta clasificación mucho tuvo que Andrés Chávez: el delantero sentenció el duelo desde muy temprano con dos golazos. El primero, a los 20, cuando sacó un remate inatajable para Mauricio Caranta; y el segundo, a los 25 del complemento, con una especia de palomita que descolocó al exarquero de Boca, que recibió el agobio del estadio durante todo el encuentro. Mientras que a los 38, apareció José Fuenzalida para decretar la goleada y darle una buena alegría a la gente de Boca a tan solo algunas semanas del Superclásico. Cómo habrá sido, que los hinchas despidieron al Vasco Arruabarrena ovacionándolo por primera vez desde que asumió como técnico del equipo. + Fixture: así continuará la Sudamericana para Boca. + Video: reviví los goles de Boca ante Central.