La hinchada de Independiente está como loca en Japón. Copó las calles del país asiático y hizo que su pasión viaje miles de kilómetros.

 

En la previa de la Suruga Bank los fanáticos coparon Osaka. Más específicamente Dotombori, el centro de la ciudad. Allí, un rio que atraviesa la avenida principal quedó pintado de rojo.

 

Pero ese lugar suena conocido, claro. Porque River jugó las semifinales del Mundial de Clubes 2015 en Osaka. Y en ese mismo lugar, los hinchas Millonarios se manifestaron como los del Rojo.

 

Banderas, cantos y locura para el deleite de los habitantes locales que poco pueden entender de la pasión argentina por este deporte.

La comparación es obvia. Pero la verdad es que los banderazos fueron bastantes parecidos. Los afortunados que pudieron viajar a Japón coparon por completo los cuatro lados que rodean al río.

 

Llenaron todo de banderas y paraguas con el color de su equipo (que hasta en este caso es un color muy parecido) y se pusieron a delirar con sus mejores canciones.

River llevó un poco más de gente, sí. Pero tiene lógica, ya que la cita era mucho más importante. Al equipo de Gallardo lo esperaba el Barcelona, mientras que el de Holan, con todo el respeto que se merece, jugará contra un débil Cerezo Osaka.

 

En fin, la pauta está clara. Sea del equipo que sea, una hinchada de argentinos en el exterior siempre dará que hablar. La pasión que llevan dentro es única.