Al igual que hace dos décadas, el presidente argentino y el actual entrenador de la selección paraguaya no dejaron atrás su pasión y se desafiaron en la previa del River-Boca.
Ha pasado el tiempo. Mauricio Macri dejó atrás la política en Boca, al menos de manera personificada, y se lanzó con éxito a la conquista del mapa político argentino. Ramón Díaz, fiel a su estilo, se marchó de River con otro título en sus vitrinas y se embarcó al desafío de volver a conducir a Paraguay a un Mundial.
Sin embargo, ninguno de los dos pudo, jamás, ser indiferente a su pasión, al equipo de sus amores; y reeditando una vieja costumbre de los años 90, pusieron una apuesta sobre la mesa de cara al Superclásico que ésta tarde tendrá lugar en el Monumental.
Víctor Zapata fue el ganador de la camioneta que, en 1999, Ramón Díaz le ganó a Macri en una apuesta tras un triunfo de River 2-0 sobre Boca.
“Siempre tenemos contacto, podemos apostar cualquier cosa, una comida, un asado. Para cualquier apuesta no cuenta el valor sino el resultado del equipo que gane”, dijo Ramón Díaz en entrevista con Radio 10. “Acepto”, dijo Mauricio Macri respecto al desafío lanzado por el riojano, y, envalentonado, agregó que “si hubiera sido en cancha de Boca, le daba el empate. Siempre es un placer comer un asado con Ramón. Mucho más cuando paga él”.
Vale recordar que en 1999, cuando Díaz era entrenador de River y Macri presidente de Boca, ambos apostaron una camioneta Mercedez Benz 4×4 para el partido que debía jugarse en el Monumental el 18 de octubre. Los Millonarios ganaron 2-0, con goles de Pablo Aimar y Juan Pablo Ángel; y el vehículo fue sorteado entre los integrantes del plantel.
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