Los Angeles Lakers y Denver Nuggets jugarán este martes el tercer partido de la serie de los Playoffs de la NBA. No será un partido más de las Finales de la Conferencia Oeste, ya que puede marcar un antes y un después: nadie jamás pudo regresar de un 0-3, lo que significa prácticamente decisiva si es que la franquicia angelina se lleva la victoria. 

El segundo partido no pudo ser mejor: los Nuggets llegaron a tener una gran desventaja, pero lograron recomponerse con un Nikola Jokic intratable. Gracias al serbio, Denver logró pasar al frente, pero la última posesión quedó en mano de los Lakers. Con un LeBron James que no estuvo en su mejor noche, Anthony Davis se puso la capa de héroe y metió el triple ganador que le dio la victoria a los suyos y el 2-0. 

 

Sin lugar a dudas, ese game-winner de Davis le habrá dolido a todos los Nuggets, pero aún más a Jokic, quien venía de hacer un partido extraordinario y quien era, hasta ese momento, el salvador de los suyos. En la conferencia de prensa luego del partido, Nikola lanzó una frase que puede causar repercusión dentro del vestuario de la franquicia que quiere igualar a Boston Celtics como las más ganadoras de la historia de la NBA

“Tienen dos jugadores realmente buenos, realmente buenos. Tienen a LeBron, que es probablemente el mejor jugador de la liga. Y tienen a Anthony Davis, que probablemente sea el mejor anotador. Así que no es fácil resolverlo”, opinó el interno mejor pasador por estos tiempos. Sin dudas, un claro mensaje a Alex Caruso, Danny Green (quien es titular) y toda esa segunda unidad que es muy importante para Los Angeles, pero que Jokic no mencionó en ningún momento.

 

 

Frank Vogel sabe que los sustitutos, como así también los titulares que acompañan a LeBron James y AD, son tan importantes como las dos estrellas. Sin ir más lejos, Caruso fue fundamental en el segundo juego de la serie y, con él en cancha, los Lakers supieron sacar las máximas ventajas. Con el orgullo herido, los Lakers van por más diferencia buscando un nuevo título NBA.