Anthony Davis es uno de los jugadores más habilidosos del mundo. Al haber crecido jugando de piloto, sus movimientos en ofensiva son tan finos como los de un jugador con 20 centímetros menos.
Es por eso que Davises un jugador prácticamente imposible de frenar en el poste, pues su habilidad y juego de pies le facilitan girar en cualquier dirección en un abrir y cerrar de ojos para abrirse espacio camino al aro.
Esta vez, su víctima fue el canadiense Kelly Olynyk, quien además, no es reconocido por sus grandes virtudes a la defensiva.
Davis llegó a Olynyk al poste bajo y con un giro sencillo y rápido, pudo sacudirse la marca del ala-pívotdel Miami Heat, que debió tirarse al tabloncillo con la esperanza de que le cantaran una falta ofensiva a Davis, que terminó clavando el balón con autoridad.
Al final del partido, el Unibrow terminó con 27 puntos, 12 rebotes, 7 asistencias, 2 triples, 3 robos y 3 bloqueos, pero no pudo evitar la caída 102 por 96 de sus Pelicans ante Miami.
