Diego Milito fue goleador y figura de Racing que le ganó 1-0 el clásico a Independiente en el Cilindro. Esta vez, Cocca no eligió y cumplió la primera mitad de la listas de deseos académica.
Desde el primer minuto de juego, Racing salió decidido a ser protagonista del clásico, para sacarse la espina del Torneo de Transición, en el que fue campeón pero sufrió una derrota ante Independiente que en su momento hizo tambalear al entrenador.
El jueves, y con la mayoría de los futbolistas que disputaron el clásico, Racing intentará que la fiesta sea completa ante Guaraní, por un lugar en las semifinales de la Libertadores.
Ahora el que quedó en la cuerda floja fue Jorge Almirón, que no le encuentra la vuelta a un equipo que sumó su séptimo partido sin conocer la victoria, con el agravante de haber sido su clásico rival el que le propinó el nuevo golpe.
El gol que definió el encuentro en favor de La Academia fue obra de Diego Milito, quien a los 22 minutos de juego cambió por gol un penal de Cuesta sobre Acuña. El príncipe fue la gran figura del partido, siempre referencia en el ataque y útil para pivotear cuando el equipo necesitó respiro. Tuvo dos oportunidades de estirar la diferencia, pero no acertó en la definición y Racing tuvo que sufrir hasta el final.
Cuando se consumía el partido, Federico Mancuello, quien jugó gracias al artículo 225, vio una nueva tarjeta roja por una infracción sobre Cerro que el árbitro Germán Delfino sancionó con excesiva rigurosidad.
+El gol de Milito:
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