El Vélez de Gabriel Heinze juega cada vez mejor. De la mano de sus jovenes jugadores, encontró una clara identidad de juego.

La víctima esta vez fue San Martín de Tucumán. El visitante no propuso nada y vio como el local lo metía en su propio arco durante todo el encuentro.

La poca efectividad en ataque del Fortín hizo que el resultado sea acotado, un 1-0 que sobre el final permitió a los de Tucumán buscar un empate que hubiera sido inmerecido. 

El gol del triunfo fue en los pies de Robertone, que entró como un 9 de área después de una genial jugada colectiva que comenzó de un lateral.

El partido tuvo lujos y buenas jugadas colectivas que elevaron el nivel. Vélez no pierde hace más de 7 meses en su cancha por el torneo local, suma 7 puntos en 5 partidos jugados e ilusiona con alejarse del descenso.