Julio Chiranini tomó la decisión de poner fin a su carrera profesional defendiendo el arco de Instituto de Córdoba y en diálogo con La Oral Deportiva reveló que el fútbol le dejó grandes amigos como Leonardo Ponzio y Ramón Wanchope Ábila, precisamente dos rivales que están disputándose nada menos que la Copa Libertadores.

Aunque a la hora de elegir por uno de los dos en la realización de este gran objetivo, el arquero se inclinó por el del Millonario, con quien ya celebró el título en 2015: "Mi corazón está en River. Ojalá gane otra vez la Copa Libertadores", expresó.

Chiarini también fue muy elogioso del trabajo de Marcelo Gallardo: "Fue de los mejores entrenadores que tuvo. Es líder absoluto. Sin vender humo, simplemente con trabajo. Su mirada y presencia lo dice todo".

Para el arquero recientemente retirado, Franco Armani es un verdadero crack, aunque dejó en claro que el número uno en su posición es Marcelo Barovero.