La selección de Uruguay ha tenido un cambio de rumbo sorprendente en estos últimos partidos de las Eliminatorias Conmebol rumbo al Mundial de Qatar 2022. La llegada de Diego Alonso estuvo en boca de todos y muchos dudaban de lo que pudiera hacer para cambiar a un seleccionado que fue decayendo considerablemente hasta el final del ciclo de Óscar ‘Maestro’ Tabárez.

El mérito de Alonso es incuestionable. Uruguay está a una victoria de lograr su boleto a Qatar 2022, que sería un premio más que merecido para esta camada de jugadores que le ha dado tantas alegrías al público charrúa. La ‘Celeste’ ha dado el ‘clic’ en el momento oportuno y ante una situación límite.

¿Qué hizo Diego Alonso para encarrilar una causa que parecía perdida? Hay ciertas decisiones que tomó el exentrenador de Pachuca, Monterrey e Inter Miami para poder lograr los resultados que necesitaba Uruguay. Aquí te detallamos los cambios.

Privacidad

Puede resultar un punto menor, pero Diego Alonso emuló a un exentrenador suyo para encontrar la privacidad que necesitaban las figuras uruguayas para preparar los partidos y no ser amedrentado por las críticas de la prensa. Haber sido parte de la selección como jugador y conocer de primera mano el día a día de los futbolistas, incidió en este punto, poco destacable para algunos, pero sumamente importante para la tranquilidad y la unión del grupo.

Alonso impuso las lonas tal como lo había hecho Passarella antes (Twitter @Buysan)

Cambio de mentalidad

El punto más importante que Alonso cambió para bien en la selección uruguaya. El convencimiento para sacar adelante los partidos clave tras la última derrota del ciclo Tabárez ante Bolivia ha sido vital. Desde ‘el vamos’ y salir a ganar a pura ‘sangre charrúa’ es algo que logró recuperar el exdelantero. Si lo mantiene en estas dos últimas fechas, veremos a Uruguay en Qatar.

Nombres propios necesarios

El funcionamiento de Uruguay en la última parte del ciclo del ‘Maestro’ Tabárez ameritaba a ciertos cambios de nombre. Lo llamativo es que Alonso no movió gran cantidad de piezas, pero sí potenció ciertas áreas donde los charrúas flaqueaban. Los laterales con los ingresos de Ronald Araújo y Mathías Olivera le dieron orden y seguridad al fondo. El ingreso de Federico Valverde le dio mayor intensidad al mediocampo y la explosión de Facundo Pellistri en la última doble fecha le dio el ataque por banda que necesitaba el seleccionado.

Pellistri, el desequilibrio que necesitaba Uruguay por las bandas (Getty Images)

Mantener a los líderes y cuidar a Suárez y Cavani

Alonso no movió a los referentes uruguayos y eso también es un mérito. Las críticas de prensa y fanáticos hacia ciertas figuras como Diego Godín o José María Giménez invitaban a un posible cambio de nombres. Pero no lo hizo y los mantuvo. Ambos fueron importantes en los encuentros ante Paraguay y Venezuela para encaminar la Eliminatoria. En tanto, Luis Suárez y Edinson Cavani aparecieron en buen estado para volver a ser la referencia arriba, a sabiendas de que más allá de ello, Darwin Núñez está para complementar con ambos en caso de ser necesario.