Al igual que había hecho ayer Atlético Madrid, Sevilla le metió presión al Barcelona, que más tarde se medirá al Levante en busca de volver a ser el líder solitario de La Liga.

El equipo del Nervión se impuso como local 2-0 al Girona, marcador que recién pudo romper en el segundo tiempo.

Fue gracias a un tiro penal que el argentino ÉverBanega cambió por gol a los 55′ y la victoria se completó con el tanto de Pablo Sarabia a los 64′.

En el local fue suplente Gabriel Mercado, quien ingresó en el complemento en reemplazo del danés Kjaer.