Cristiano Ronaldo marcó el inicio, pero esto no ha hecho más que empezar. La expansión de Arabia Saudita por medio del fútbol no conoce de límites y desde Inglaterra anuncian el plan que ostenta la familia real de Riad para seguir comprando talento a base de millones. Faltan por gastarse un total de 23.000.

Desde que el fondo PIF (Mohamed Bin Salman) anunciase la compra de cuatro de los principales clubes del país el mercado no ha dejado de moverse al ritmo de la liga saudí. Karim Benzema, N´Golo Kante, Roberto Firmino, Rubén Neves, Marcell Brozovic, Riyad Mahrez y Jordan Henderson, algunos de los ejemplos de lo que se pretende en Oriente Medio. Queda un mes para que termine el verano y las operaciones no van a detenerse. Eso sí, hay plan de cara al futuro.

Ben Jacobs, periodista del Reino Unido en The Guardian, afirma que el fondo PIF sigue en una carrera mirando al 2030 que le permita ostentar uno de los torneos más prestigiosos de todo el planeta. Ser la sede de una Copa del Mundo se hace clave, pero para que esto ocurra primero hay que potenciar el producto local. La cifra para conseguir esto, tasada en 23.000 millones de euros.

Cristiano Ronaldo: Getty Images

Órdenes del jeque

“El Ministerio de Deportes ha asignado 23 mil millones en transferencias de la Saudí Pro League desde ahora hasta 2030”, palabras que Ben Jacobs acompaña en Twitter con una imagen de Kylian Mbappé. Cerrar al delantero del PSG parece imposible, pero supone una muestra viva de lo que se pretende en Oriente Medio.

Hablamos de un gasto sin precedentes a nivel mundial, de un nuevo orden que a 25 de julio solo la Premier League puede acompañar en cuanto a inversión se refiere. La ecuación es clara: Arabia Saudita ha llegado para quedarse y para convertirse en el próximo gran agente del fútbol. Europa tiembla y salvo el Reino Unido, nadie puede competir a corto plazo.