Si bien todavía no está confirmado (hasta el 30 de junio sigue siendo oficialmente jugador del París Saint-Germain, además de que el libro de pases del campeonato norteamericano abre recién el próximo miércoles cinco de julio) es casi un hecho que el Inter Miami contará con Lionel Messi para la segunda parte de la Major League Soccer de los Estados Unidos.
Y en el elenco que preside David Beckham entienden que deben estar atentos porque en el período de las negociaciones, que coincide en gran parte con el proceso para las transferencias tanto del fútbol europeo como del sudamericano, pueden aparecer amigos del Campeón del Mundo interesados en acompañarlo en su camino por la MLS con la camiseta del conjunto de Florida.
Tal como sucedió en las últimas horas con Sergio Busquets. El volante decidió no renovar su contrato con el Fútbol Club Barcelona tras 15 temporadas consecutivas (y un total de 722 partidos) y, aunque según rumores recibió propuestas de la Liga Pro de Arabia Saudita, ya tendría las conversaciones aceitadas para decantar en el Inter Miami de Lionel Messi.
Pero no sería el único. En esta categoría vuelve a aparecer en la superficie el nombre de Luis Suárez. El delantero uruguayo, a pesar de que hace días él mismo comentó a la prensa de su país que tiene contrato con Gremio hasta diciembre del 2024 y que, en teoría, le gustaría cumplirlo, los trascendidos más recientes señalan hacia un panorama absolutamente diferente.
Así lo apunta también el portal GZH de Brasil, en donde reportan que el equipo de Porto Alegre no se opondría a dejar salir al Pistolero para que juegue con su amigo Leo en la MLS. ¿La razón? Básicamente porque no quieren contar con un jugador que no esté contento con su situación. Y en segundo lugar porque entenderían que al mostrarse flexibles podrían sacarle mayor provecho económico a un futbolista que, en definitiva, ya tiene 36 años.