Cuando Inglaterra se encontraba venciendo 1 a 0 a la Selección de Croacia, Harry Kane tuvo en sus pies el segundo para su selección.

Bueno, dos veces lo tuvo: primero definió al cuerpo del arquero y en el rebote, ya sin portero, terminó rompiendo el palo con su remate.

Una situación clarísima de gol que le pudo dar al conjunto inglés el segundo tanto del partido y meter un pie en el final.

¡Qué lástima!

+ La jugada: