Más allá de las luces del tenis, de los títulos y los suntuosos premios dinerados que entregan los grandes torneos, se esconde la otra parte de un deporte cada día más mercantilizado. El lado B, el costado oscuro que impone otras condiciones. En tiempos en los que los fanáticos de Star Wars celebran su día (lo hacen cada 4 de mayo desde 1979), bien podría decirse el lado oscuro… del tenis.

El deporte de alto rendimiento otorga cifras siderales, casi pornográficas en comparación con la pobreza extrema que vive el mundo. En este caso, mega estrellas que empuñan una raqueta con enorme pericia y talento. Esos son los que están en la cúspide de la pirámide de un deporte cada vez más competitivo y cruel. Sobre todo, con aquellos hombres y mujeres que no acceden a los grandes torneos y sobreviven y deambulan por distintos torneos. Esos jugadores y esas jugadores, muchas vecen caen en la compleja red de estafadores de ilusiones que los inducen al sucio y perverso mundo delos partidos amañados.

Ksenia Palkina, suspendida por 16 años (only-tennis.com)

En ese espacio hay miles de historias que aceptan entrar en un espiral negativo, en un camino que suele convertirse en una bola de nieve que no se detiene. O sí, cuando los descubren y ya es tarde para volver al lado luminoso. En los últimos días, la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) castigó a una exjugadora del top 170, nacida de Kirguistán, Asia Central. Se trata de Ksenia Palkina, quien llegó a ser 163° del ranking mundial de la WTA en 2009, y fue suspendida por 16 años (de los cuales seis fueron eliminados) y multada con 100.000 dólares (87.500 fueron anulados) al admitir la propia deportista que “violó las reglas del Programa Anticorrupción del Tenis”. Ganadora de once títulos individuales entre 2006 y 2018 (y 27 en dobles), asumió haber cometido “delitos de amaño de partidos en 2018 y 2019″. Su suspensión es retroactiva al comienzo de su sanción provisional, que fue el 22 de noviembre de 2019.

Según el diario francés L’Equipe, detrás de la suspensión de Ksenia Palkina hubo amenazas, ratificadas por la exjugadora. “Me dijeron: ‘si no lo haces, sabemos dónde viven tu hija y tu madre’. Tenían su dirección y me enviaron una foto de mi madre sacando a mi hija del colegio”, fue una de la frases que habría recibido para llevarla a dejarse sobornar y, además, inducir a una de sus compañeras de hacer lo mismo durante un torneo internacional de la ITF de marzo de 2019 en Gonesse, en Francia. Al parecer, Palkina habría aceptado 500 euros para dejarse ganar. Una acción que una de las tantas asociaciones criminales usa con frecuencia para meter sus fauces despiadadas y espurias.

Palkina fue detenida por la policía gala el 24 de septiembre de 2019 (seis meses después del torneo de Gonesse). Los efectivos francés llegaron a la jugadora nacida en Khabarovskiy Kray (Rusia), tras la confesión de la uzbeca Albina Khabibulina, 492° en 2011. La uzbeca había sido detenida unas horas antes del arresto de Palkina en el marco de una investigación preliminar abierta por la fiscalía de Pontoise (Francia) por “corrupción deportiva”, dadas las altas apuestas anormales hechas en Londres. Khabibulina había perdido el cuarto game del segundo set en un match ante la francesa Aminata Sall (luego cayó 5-7, 6-0 y 11-9), en el mentado torneo de Gonesse.

¿Cómo actúa la Agencia Internacional de Integridad del Tenis?

Ante una sospecha o ante un aviso, la ITIA registra, evalúa y realiza un seguimiento como un indicador de que puede haber sucedido algo inapropiado. Luego realiza un análisis y si se entiende que hay una situación anómala, la ITIA inicia una investigación completa.

Esto fue lo que ocurrió y, al suceder en Francia, contó con el apoyo de Servicio Central de Carreras y Juegos (SCC). Al verse apremiada, la uzbeca Khabibulina no aguantó la presión y confesó que tenía un amigo que también jugaba al tenis y que le había ofrecido “perder su saque en el cuarto game del segundo set” del torneo en Gonesse, cuyo premio total era de 14.500 euros.

La manera de localizar y acceder a Khabibulina fue a través de las redes sociales. En su caso, Facebook fue el puente usado por Yahor Yatsek, ex entrenador del ruso Aslan Karatsev, actual 34° del ranking, que saltó a la fama al alcanzar las semifinales del Abierto de Australia 2021 siendo 114° del mundo y habiendo superado la clasificación ATP.

Luego de comparecer ante la policía, Palkina fue acusada de “corrupción activa” y Khabibulina quedó procesada por “corrupción pasiva”. En diciembre de 2021, la ITIA la inhabilitó “de por vida por violar varias normas del programa anticorrupción”.