El 2 de agosto de 2008 Arsenal enfrentó a Juventus por la Emirates Cup, ese partido marcó el debut profesional de un joven de 16 años, 8 meses y 12 días de vida. Jack Wilshere.
Llamado a ser la máxima promesa del fútbol inglés, Wilshere lamentablemente no pudo cumplir con esa expectativa a raíz de las lesiones, que lo mantuvieron fuera del campo durante gran parte de su carrera. En total, sumando todas sus lesiones, pasó más de 4 años de su carrera fuera de las canchas. Esto lo llevó a alejarse del fútbol de primer nivel, y retirarse de la actividad con apenas 30 años.
Una vez retirado, Wilshere regresó al Arsenal, su casa y el club donde jugó casi 200 partidos, para ser entrenador de las juveniles. Hoy, con 32 años, eso le da la oportunidad de convertirse en el nuevo entrenador del Norwich City, un histórico equipo de la Premier League que, en este momento, milita en el Championship.
De acuerdo a Fabrizio Romano, el nacido en Stevenage y otrora portador del dorsal número 10 de la Selección de Inglaterra, tendría su primera experiencia como entrenador del primer equipo en los canarios, que se encuentran séptimos en la segunda división inglesa.
Las lesiones limitaron una prometedora carrera
Super Jack oficializó su retiro luego de vestir la camiseta del Århus GF danés, y luego de ello se juntó con el ex futbolista Ben Foster en su podcast para relatar algunos de los duros momentos que pasó en su carrera. Especialmente su primera gran lesión, la que lo afectó hasta el retiro.
“Mi primera lesión fue la peor y pagué mucho por ello“, admitió Wilshere. “Fui a ver al cirujano y me dijo que nunca había visto algo así. Tuvieron que llamar a un especialista para hacer la cirugía, y yo no lo supe hasta unos años después. Regresé unos seis años más tarde, tenía 25, volví a ver el cirujano y me dijo: ‘oh, ¿todavía estás jugando?’“.
Wilshere se perdió más de un centenar de partidos del Arsenal y estuvo fuera por un acumulado de más de cuatro años a raíz de sus lesiones, que limitaron una prometedora carrera. Ahora tiene una nueva oportunidad de dejar su marca en el fútbol, como varios jóvenes entrenadores, desde los banquillos, y Norwich será su primera gran prueba.