Mientras todos los equipos del fútbol argentino se están reforzando, en Independiente todavía no pudieron concretar a su primera incorporación. Y para Eduardo Domínguez es una gran complicación porque, como si fuera poco, perdió a Alan Velasco.

Después de la salida del mejor proyecto de inferiores que tuvo el Rojo después de Esequiel Barco, los directivos estaban haciendo todo lo posible para sumar a Ramón Ábila, quien no tendrá lugar en Boca. Sin embargo, desistieron de su contratación, ya que en el Xeneize no quieren liberarlo a préstamo (le quedan seis meses de vínculo y deberían renovarle), como así tampoco quieren rescindirle su estadía.

Ya sin chances de incorporar al ex Huracán, los directivos del Rojo recibieron un ofrecimiento para sumar a Leandro Fernández, quien tiene pasado en la institución pero no se fue de la mejor manera, ya que en su momento decidió no renovar su contrato y no le dejó dinero al club de Avellaneda. Y ahora que quedó en libertad de acción tras su paso por Internacional SC y Nacional de Montevideo, su camino se está por cruzar con Independiente.

Según la información que brindó el periodista Gastón Edul en TyC Sports, los directivos están afinando los números del contrato y hay muchísimo optimismo de poder sumarlo, ya que el delantero de 30 años tiene un fuerte deseo de regresar al Rojo, además de que su contratación vendría de la mano de Eduardo Domínguez, quien le dio el visto bueno a los directivos después de que le hicieran llegar el nombre del ex Vélez Sarsfield.

El santafesino ya sabe lo que es vestir la camiseta del Diablo, donde estuvo entre 2016 y 2020, ganó la Copa Sudamericana, la Suruga Bank y además disputó un total de 61 partidos, marcó 18 goles y brindó 10 asistencias.