Lejos de poder hacer la unificación de títulos mundiales ante Anthony Joshua que esperaba para agosto, Tyson Fury se vio obligado por un fallo arbitral a negociar la trilogía de combates ante Deontay Wilder a la que se había comprometido cuando firmó el contrato de la revancha de febrero de 2020, en la que le arrebató el cinturón del CMB.

Originalmente estaba previsto que ese combate se desarrollara el 24 de julio en la T-Mobile Arena de Las Vegas, pero hace un par de semana se informaron los contagios de coronavirus del británico y parte de su equipo, por lo que la cartelera debió aplazarse para el 9 de octubre, manteniendo su misma sede.

En las últimas horas, quien volvió a encender la previa eterna de la trilogía fue el padre de Tyson Fury, John, quien aseguró que su hijo se encargará de aniquilar a Deontay Wilder para demostrarle al mundo que haber hecho la trilogía y no la unificación de títulos mundiales solo fue una pérdida de tiempo.

"Ni siquiera se merece una tercera pelea, ¿verdad? Es una persona horrible que fue golpeada hasta la muerte. ¿Qué puede hacer? No ha mejorado, ¿verdad? Con su entrenador de Mickey Mouse allí. He visto lo que está pasando. Tyson lo aniquilará esta vez", dijo en diálogo con BoxingSocial.

Y agregó: "Ha tenido un respiro porque Tyson tiene COVID-19. Pero cuando Tyson lo consiga, será el final de Deontay Wilder. De todos modos, solo está en esto por unas pocas libras. ¿Dónde obtendrá otro día de pago si no pelea? En ninguna parte. Trabajaría en los autobuses de donde sea que sea".