A Chivas no le queda otra opción: debe dejar atrás el fracaso que significó esta temporada y, mientras otros equipos se concentran en ganar este Clausura, aprovechar para tener una ventaja en el mercado de pases y fichar nuevos futbolistas.

Una vez que finalizó el duelo entre Tigres y Pachuca, que nos tuvo en vilo a todos hasta el pitazo final, Erick Aguirre mostró sus ganas de ir al conjunto hoy comandado por Tomás Boy.

"Si me llaman es muy difícil decir que no. Es una gran institución, muy bonita para un jugador como yo que le gustan los retos”, comentó el volante ayer, a la salida del vestidor de El Volcán.

 

"Ilusiona que tenga interés uno de los clubes más importantes de México. Ahora me debo a Pachuca. Ya en estos días se verá si sigo acá, donde estoy muy contento”, añadió.

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