Este encuentro es de esos en los que el marcador no refleja con totalidad la diferencia entre un equipo y otro. Monterrey fue muy superior al Toluca, mucho más de lo que indican los números.

Rayados ganó por 2 a 0 en el Gigante de Acero, en la quinta jornada de la Liga MX.

El primer tiempo fue una paliza futbolística. Lo único para reprocharle a los dirigidos por Diego Alonso fue la poca efectividad: la mala puntería, los palos y situaciones muy puntuales fueron las razones por las que los dos equipos se marcharon al vestidor con solamente un gol de diferencia.

El único tanto de esa primera mitad lo marcó Miguel Layún, a los 22 minutos. El lateral pateó un tiro libre a 50 metros del arco. El balón, que fue con intencionalidad de centro, no fue tocado por nadie y se coló en el arco defendido por Alfredo Talavera.

En el complemento no vimos tantas situaciones de gol de los locales (aunque igual generaron mucho peligro). En vez de eso, eligieron mantener el control de la pelota y resignar algunos ataques directos.

A los 55, Nicolás Sánchez peinó un centro desde la izquierda y marcó el segundo tanto del juego.

A partir de allí, La Pandilla se dedicó a mover el esférico de un lado al otro y esperar a que el árbitro de el pitazo final.

De esta manera, Monterrey definitivamente dejó atrás su mal inicio y ya se perfila para ser uno de los animadores de este Apertura.

Toluca, por su parte, vive un pésimo momento. Apenas tiene una unidad en el torneo, no se ve una idea de juego clara y la continuidad del entrenador Ricardo La Volpe pende de un hilo.