Miguel Almirón le pegó una patada muy fuerte en la parte posterior de la rodilla al Gallito Vázquez a los 62 minutos. Acción por la que vio la tarjeta roja.

 

Pero tras la violenta acción, sucedió que Miguel Layún se acercó al paraguayo para recriminarle lo que había hecho y terminó a los empujones con otros futbolistas guaraníes.

Una vez finalizado el partido, el lateral de Rayados realizó su descargo sobre lo sucedido en el campo de juego y dejó en claro su postura sobre la situación.

"Cuando vi la patada a Gallito, me molesto porque me pareció que pudo lesionarlo, y eso fue lo que le reclamé a Almiron, que era un amistoso y era innecesario poner en riesgo a un compañero de profesión". Así comenzó el primer de los dos tuits que el ex-Porto le dedicó a la situación.

En la segunda parte, pide perdón y remarca que las cosas no deben irse de las manos por defender a un compañero: "Quiero ofrecerle una disculpa a los compañeros de Paraguay y afición por lo sucedido".

¡Muy bien Miguel!