No podemos más. Las redes sociales, una vez más, nos regalan un video épico que estamos viendo una y otra vez.
Se trata de una intimidad del plantel del West Ham United de Inglaterra, que estaba de festejo por el cumpleaños de Declan Rice.
Fue Wilshere quien tuvo una idea bastante rara para darle como regalo a su compatriota y compañero.
El atacante dejó una cámara fija y así como si nada, se metió por completo en un lavarropas. ¡Exacto, un lavarropas!
Cerró la puerta y allí espero pacientemente a que un empleado del club lleve a la víctima, engañada.
Apenas puso un pie cerca del electrodoméstico, de adentro salió una persona y un grito que le hicieron pegarse el susto de su vida.
Sin dudas, un cumpleaños que jamás olvidará. ¡Pobre!
