Con dos certámenes locales, Rodolfo Arruabarrena se despidió de Boca en el año 2016 y partió hacia países exóticos en busca de nuevos desafíos.
Para suplantar la partida del Vasco, el Xeneize fue a buscar justamente a otro ex jugador de la institución: Guillermo Barros Schelotto.
El Mellizo, también de etapa discreta, dejó su cargo a fines del pasado 2018. Fue un tiempo más tarde cuando Carlos Tévez, ya con Gustavo Alfaro como nuevo DT, lanzó un par de bombas y arremetió contra el accionar del entrenador.
En diálogo con el programa radial Jogo Bonito, Arruabarrena se metió de lleno en la polémica y sentenció: “Criticar a un técnico cuando se va son cosas que no suman. Es traerle problemas al club que no sirven”.
Defendiendo a su colega y disparando contra El Apache, el hoy director técnico delAl-Ahli (Emiratos Árabes Unidos) culminó: “Para criticar al entrenador, tiene que ser primero cara a cara. Las cuestiones se hablan frente a frente. Si Tévez criticó a Guillermo, primero lo debió haber hecho cara a cara”.