Desde que Paolo Guerrero estuvo habilitado para jugar en el Inter de Porto Alegre, participó en todos los partidos que pudo. De hecho, al terminar la Copa América no pasaron ni tres días y el Depredador ya estaba jugando en su club.

Así, el Pistolero tiene la confianza absoluta de su técnico sobre jugadores como el Diente López y Rafael Sobis. Esto quedó confirmado ayer cuando estuvó en los 90' y además pateó el primer penal. 

Este lo ejecutó cruzado y dio inicio al triunfo y pase de los de Porto Alegre por sobre Palmeiras. Tras ello, el técnico de los rojos Odair Hellmann tuvo un gesto con su goleador. 

Y es que al acabar el partido, el técnico fue donde Guerrero y lo que parecia ser un abrazo normal, terminó siendo una muestra excesiva de emoción y amor. Guerrero lo recibió tranquilo y después atinó a sonreir. 

Así, Internacional clasificó a las semifinales de la Copa de Brasil. Este campeonato da un cupo para la Libertadores 2020, premio que no es menor para ningún equipo del continente.