En el análisis que Martín Liberman y Gustavo López hicieron de la jornada de Superliga en el programa Juego Sagrado, coincidieron en señalar a Jorman Campuzano como la figura del triunfo de Boca sobre Atlético Tucumán.
El buen rendimiento del mediocampista central colombiano, sumado a que en Córdoba ante Talleres quien se había destacado fue su compatriota Sebastián Villa, llevó a Liberman a hacer una curiosa reflexión.
“¿Sabés qué pasa ahora? Se fueron los insultadores. Viste que ya Tevez no los insulta, no sé qué hará Wanchope cuando vuelva a jugar, que era otro de los que los insultaba”, disparó.
Y cayó todavía con más fuerza contra otros que ya no están en el plantel: “Benedetto, Nández… Los insultaban a los chicos colombianos y no los dejaban crecer”.
Liberman destacó que ante Atlético Tucumán vio por primera vez a Jorman Campuzano pidiendo la pelota en Boca y dando indicaciones sobre hacia dónde jugarla.
“Eso marca que algo cambió. Por lo menos no hay brotes internos que jueguen en contra de los propios futbolistas”, concluyó.