Eduardo Berizzo fue un jugador con mucha personalidad, garra y entereza; serio y hermético en su vida privada. Como entrenador curtió muchó fútbol argentino, se hizo fuerte en Estudiantes de la plata Plata y emprendió vuelo a Chile, donde aterrizo en O'Higgins y salió campeón.

Con la mente puesta en el viejo continente, el “Toto” se subió nuevamente al avión y ahí se agrandó la lista: Celta de Vigo, Sevilla, Athletic Club Bilbao. Tuvo victorias y derrotas, aprendió y se hizo conocido, siempre con humildad y juego, algo que lleva impreso en el ADN.

Dios aprieta, pero no ahorca

En 2017, cuando transitaba lo mejor de su carrera, la vida lo sorprendió y tuvo que dar un paso al costado, dejar a un lado el fútbol para dedicarse por completo a su salud. El mundo del deporte lo acompañó en ese momento, lo abrazó como nunca. Jugó el partido más importante de su vida, ganó y fue una gran alegría para el futbol.

Nunca es tarde para volver

Y se le dio una nueva oportunidad en su carrera, reconocido por ser un gran profesional y buena persona, el cordobés le dijo sí a una de las tantas propuestas que tenía: Paraguay. Su debut: La copa América.

“A los sudamericanos nadie nos invita a la Eurocopa”

No está de acuerdo, pero es lo que toca. Su seleccionado debutó contra el invitado Qatar en un amargo 2 a 2 del que prefiere olvidarse. Fiel al estilo Bielsista. su frase preferida es “nada está escrito”. Berizzo no tiene miedo y se achaca las culpas, no menosprecia a sus rivales y entiende que son normales las críticas a su planteo táctico. Se escuda en la idea del cambio y la importancia de los procesos.

Esta noche enfrentará a la Selección Argentina, esa misma que supo representar. Lo conoce mucho a Messi; sabe ganar y perder contra el capitán de la albiceleste, no tiene miedo en confesar cómo hará para anularlo. Se arriesga sabiendo que tiene algo; tiene un punto y tiene dos goles. Si los pronósticos no fallan, el “Toto” se le para a la selección nacional con un aguerrido 4-3-3 que obligará a los once de Scaloni a jugar mejor que hasta ahora. El Paraguay de Berizzo peleará siempre para ganar la mayor cantidad de partidos posibles. No hay nada peor para un argentino en competencia que tener en frente a otro argentino.