James de nuevo fue titular y tuvo de nuevo una destacada actuación a pesar de no marcar o asistir con el equipo Bávaro. En una de sus características escapadas en velocidad trató de avanzar, pero se encontró con una barrida por parte de un rival que causó todo tipo de reacciones y un resultado final inesperado.
El cafetero se retorció del dolor y el árbitro de inmediato expulso al infractor, este se fue al vestuario indignado, normal hasta ahí. Lo curioso fue cuando tuvo que devolverse porque revisando el VAR, el colegiado dio marcha atrás a su decisión y le puso la amarilla por lo que pudo seguir jugando en una acción que muchos consideraron justa, ya que no era para roja. Increíble.