En Italia, el fútbol se detuvo por completo el pasado 9 de marzo. Es decir que el mencionado país europeo, cuya liga es una de las más importantes de todo el planeta, lleva más de un mes sin ver actividad. Es que Italia es uno de los países más afectados por el desembarco del coronavirus en el globo terráqueo, presentando números realmente escalofriantes relacionados con la cantidad de infectados y también de fallecidos. Por ello es que, por ahora, sigue el aislamiento.
Cabe recordar que, en el marco de la presente temporada de la Serie A de Italia, Juventus y Lazio se encontraban peleando palmo a palmo para hacerse con el título. Un poco más atrás aparecía Inter de Milán, que comenzó bien pero se fue diluyendo progresivamente. En un momento se analizó fuertemente la posibilidad de que se anule la temporada, pero muchos equipos presionaron para que se continúe una vez normalizada la situación, algo que podría suceder.
En ese contexto, Gabriele Gravina, presidente de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC), brindó precisiones este viernes con respecto a la fecha potencial de la vuelta del fútbol en Italia. En ese orden, el alto directivo italiano se mostró bastante optimista con relación a la normalización de las actividades y la disminución de los efectos de la pandemia. Básicamente, Gravina expuso que la idea es que el fútbol vuelva entre fines de mayo y principios de junio.
“Espero que cada equipo pueda jugar en su propio estadio. Si nos proyectamos a largo plazo, me gustaría darles a los italianos la esperanza de que entre finales de mayo y principios de junio pueda ser posible jugar también en los etsadios del norte de Italia”, comenzó exteriorizando Gravina en declaraciones brindadas a ‘Rai Radio 1’. Cabe recordar que Italia acumula 172.434 contagiados confirmados y 22.745 fallecidos registrados como consecuencia del COVID-19.
“Habrá un período de control para garantizar los negativos de todos los que participen en los partidos. Si todos dan negativo, no hay problema de distanciamiento o contagio. Estamos en un momento complicado para el fútbol y para la economía. La esperanza es comenzar el 4 de mayo con los entrenamientos con un protocolo de control enviado previamente al gobierno”, finalizó el presidente de la federación italiana.
