Si pudiese, Luis Suárez se pelearía con los once jugadores del otro equipo. Este sábado, tardó cuarenta segundos en comenzar su primera discusión.

En el arranque, el delantero uruguayo se posicionó sobre la banda izquierda, intentó tirar una pared pero cuando corrió hacia delante fue derribado por Luis Advíncula.

El peruano lo tocó sin pelota a Suárez y el goleador del Barcelona no se achicó ni un poco cuando cobraron la falta.

Cuando cayó pegó un grito como si le hubiesen tirado un tiro desde la tribuna y después le dijo de todo al del Rayo Vallecano.

"Haceme falta pero no tires el codo", le gritó en la cara Suárez a Advíncula. ¡Muy picante en el arranque!