Tras debutar en La Liga de España con una dura y agónica derrota como visitante de Athletic Bilbao, Barcelona tenía la obligación y también la urgencia de recuperarse.

Sin Lionel Messi, todavía lesionado, el conjunto comandado tácticamente por Ernesto Valverde se presentó ante su público en el Camp Nou como local de Real Betis.

Y la historia no comenzó para nada bien para el campeón vigente del certamen doméstico español, ya que Nabil Fekir puso en ventaja a la formación visitante.

Sin embargo, Barcelona se recuperó y lo hizo de gran manera. Un doblete de Antoine Griezmann y un tanto de Carles Pérez desnivelaron la historia para los locales.

Pero eso no fue todo: instantes después, Sergio Busquets recuperó una pelota y le dio una gran asistencia a Jordi Alba, que remató cruzado para estampar el 4-1.