Una lesión de un futbolista profesional desde afuera se compone de un parte médico y un número: la cantidad de días que estará sin jugar. 

En su recuperación, poca transcendencia pública toma el jugador, que se aleja durante semanas o meses de las cámaras. No se habla del díficil momento que significa para él. 

Este viernes, El Chiringuito reveló a través de sus redes sociales unas imágenes muy fuertes respecto a Ansu Fati.

El delantero del Barcelona, quien se había roto los meniscos de la rodilla izquierda, dejó por primera vez el hospital donde estaba a cinco días de la operación.

Ansu Fati fue llevado en silla de ruedas hasta la puerta del auto que lo llevaría a su casa y ni siquiera pudo pararse por sus propios medios.

Debió ser acompañado en andas por un asistente para sentarlo en el vehículo. ¡Fuerza, Ansu!