El 23 de marzo la FIFA abrió el proceso de presentación de candidaturas para albergar el próximo Mundial femenino, que será en 2023. Y el 21 de abril cerró esa primera parte del proceso, recibiendo en total cuatro propuestas para ser anfitriones. 

Brasil fue uno de los que expuso su deseo a través de un comunicado de su federación. Pero este lunes la FIFA se encargó de informar cuáles son las otras propuestas que recibió, que llegaron desde Europa (UEFA), Norteamérica (CONCACAF) y África (CAF). Las dos restantes además de CONMEBOL (la AFC y la OFC) son las que este año coorganizarán el Mundial.

Las propuestas

Los países que declararon su interés fueron: Bélgica, Países Bajos y Alemania (declaración de interés conjunta); Brasil; Estados Unidos y México (declaración de interés conjunta) y Sudáfrica.

 

¿Cómo sigue el proceso? La FIFA enviará el acuerdo de candidatura —documento necesario para garantizar el cumplimiento de los principios clave del proceso de presentación de candidaturas— a las FM interesadas, que tendrán hasta el 19 de mayo para devolverlo y confirmar su participación. 

"Estamos encantados con las declaraciones de interés recibidas, en buena parte porque proceden de federaciones miembro con una arraigada tradición futbolística y pertenecientes a cuatro confederaciones distintas, lo que confirma la popularidad uniforme del fútbol femenino por todo el planeta", declaró Fatma Samoura, secretaria general de la FIFA.

La historia

Los Mundiales de fútbol femenino organizados bajo el ala de la FIFA comenzaron en 1991, con el torneo que se disputó en China, que también fue anfitrión en 2007. A lo largo de la historia fueron sede Suecia, Estados Unidos (dos veces consecutivas, en 1999 y 2003), Alemania, Canadá y Francia. Nunca se organizó un Mundial ni en África ni en Sudamérica. 

 

La votación

Luego del proceso, que durará cerca de un año y tendrá varios pasos, se prevé que el Congreso de la FIFA nombre a la(s) anfitriona(s) mediante votación pública el 17 de mayo de 2024.