Luego de un fin de semana de descanso, volverá la actividad en la Formula 1. Y mientras la gran mayoría de ojos se van con lo que harán Charles Leclerc y Max Verstappen, quienes apuntan a ser los grandes candidatos al título mundial, hay un piloto que está muy ilusionado con dar el golpe en la tercera fecha. Se trata de Sergio Pérez, quien ha corrido con mala fortuna en Baréin y Arabia Saudita, pero llega renovado a Australia.

Checo ha realizado un trabajo extraordinario en los primeros dos Grandes Premios, pero solamente ha cosechado 12 puntos y se encuentra séptimo en la tabla de conductores. Una falla en su motor lo privó de un podio en la apertura de la temporada; mientras que un desafortunado Safety Car no lo dejó ganar en Yeddah. Ahora, confía en que su suerte cambiará y podrá llevarse la victoria, con lo que lanzó una amenaza para Ferrari y su propio compañero.

"Hasta ahora las carreras han estado muy reñidas y el equipo y yo hemos tenido mala suerte en ocasiones, pero confío en que mi suerte cambie este fin de semana. Tenemos un paquete fuerte esta temporada y estoy deseando subirme al coche de nuevo para ver lo que podemos hacer", confesó el mexicano, quien está en su último año de contrato con Red Bull Racing y debe entregar resultados.

Más adelante señaló: "Este año el trazado de la pista es nuevo, así que será interesante ver cómo se desenvuelve en ella esta nueva generación de coches. A principios de esta semana hice un trabajo de simulador y creo que los cambios deberían ser buenos para el espectáculo y harán que las cosas sean entretenidas".

Sergio Pérez, contento con volver a Australia

El Gran Premio de Australia no se realiza desde el 2019, por lo que Checo está contento con volver. "Es genial volver a Melbourne después de dos años de ausencia. Siempre es un lugar divertido para correr. Los aficionados son siempre geniales y estoy seguro de que están muy emocionados por tener de nuevo la Formula 1 en Australia".