Pese a que las cosas no le están saliendo como esperaba en la temporada de la Formula 1, el piloto mexicano Sergio “Checo” Pérez consiguió una victoria de consolación al vencer nada más y nada menos que a PEMEX, en su carrera en los tribunales, algo que le redituará al mexicano en una paga millonaria por parte del Gobierno de México.

En 2018, la petrolera mexicana anunció en todo lo alto que el volante tapatío sería su nuevo fichaje para patrocinarlo mientras era parte de Force India, pero la fiesta le dudaría muy poco, pues a la llegada de Andrés Manuel López Obrador, como Presidente de México, este apoyo se canceló de forma imprevista para 2019, después de que al inicio de su contrato recibiera 3.5 millones de dólares.

 

Ante esto, Pérez decidió demandar a la empresa MGI Asistencia Integral, la cual es una filial privada de la petrolera mexicana, quienes no consiguieron demostrar que el volante estaba errado, y por ello recibieron una condenada en la que tendrán que pagar 2.8 millones de dólares, lo que equivale a 56.2 millones de pesos, por el incumplimiento de contrato, además de los intereses que aún no han sido calculados.

 

Pemex había patrocinado a “Checo” en temporadas previas de Fórmula Uno, pero tras el cambio de sexenio, la empresa estatal alegó tener “otras prioridades de gasto” y ya no apareció entre sus patrocinadoras cuando presentó el monoplaza y uniforme que correría en 2019, para la escudería Racing Point.