La aventura de Dani Alves en la Liga MX está muy lejos de ser como esperaba. Por el contrario, está al borde, si no lo es ya, de convertirse en una auténtica pesadilla, pues desde que se puso la playera de los Pumas de la UNAM no ha conocido de victorias y acumula tres empates y cuatro derrotas en el Apertura 2022.
Este sábado no fue la excepción. El equipo dirigido por Andrés Lillini, quien reconoció no encontrar respuestas para el mal momento, cayó 3-1 ante unas Chivas de Guadalajara en pleno ascenso tras pasarla también muy mal y quedó relegado a la anteúltima posición de la clasificación.
A juzgar por la pobre actualidad, Dani Alves se mantiene jugando en Pumas más por su historia, por su trayectoria de gran campeón con Barcelona y por lo que dio al seleccionado brasileño que por lo que está pudiendo demostrar dentro del campo. Pero con todo aquello, sigue generando lo que nadie más, incluso en sus rivales.
Sucede que finalizado el encuentro ante Chivas de Guadalajara las cámaras de la transmisión captaron el momento en que Alan Mozo, futbolista que recientemente dejó Pumas para sumarse al Rebaño en este Apertura, le pidió intercambiar playeras, a lo que el brasileño, pese a la nueva frustración, accedió comprometiéndose a entregársela en el vestuario.
Dani Alves estuvo al borde la la expulsión
La nueva noche negra de Dani Alves pudo incluso haber sido peor, pues el árbitro del partido le enseñó la tarjeta roja a los 81 minutos de juego, por una entrada desde atrás sobre Alexis Vega. Sonriendo, el brasileño aseguró haber tocado el balón y poco después la revisión que se hizo desde el VAR le dio la razón, permitiéndole continuar en el terreno de juego.