El fútbol mundial podría presenciar un evento sin precedentes: Rusia, a través de su Federación de Fútbol, estaría gestando un proyecto audaz para organizar una Copa Mundial alternativa. Este torneo paralelo estaría dirigido a las selecciones nacionales que no logren clasificarse para el Mundial oficial de la FIFA en Norteamérica 2026, una noticia que ha causado revuelo y abre una puerta de esperanza para países con gran fervor futbolístico, como la Selección Peruana, en caso de no asegurar su boleto.

El Mundial de los países no clasificados

Este ambicioso plan nace como respuesta directa al veto impuesto a Rusia por la FIFA y la UEFA tras el conflicto en Ucrania en febrero de 2022, lo que les impide participar en las clasificatorias mundialistas y la Eurocopa. Al buscar mantener activa a su selección y generar un foco de atención global, los directivos rusos planean celebrar este certamen de forma simultánea al torneo de la FIFA, añadiendo controversia al considerar, incluso, realizarlo en suelo estadounidense.

Este sería el Mundial de los países no clasificados con Perú. (Foto: X).

Según los informes, la RFU, liderada por Alexander Dyukov, contempla un torneo con una participación estimada de entre 8 y 12 selecciones de diversas confederaciones que queden fuera de los cupos ampliados para 2026. Es en este contexto donde la ‘Bicolor’ peruana se perfila como una candidata ideal. Dada la histórica dificultad en las Eliminatorias CONMEBOL, la selección incaica sería atractiva para el Mundial paralelo por su arrastre popular, nivel competitivo y la significativa movilización de aficionados, especialmente en Norteamérica.

¿Quiénes podrían participar en este Mundial?

A nivel sudamericano, otras selecciones de gran convocatoria, como Chile, que luchen por el repechaje o no alcancen uno de los siete cupos directos, también son consideradas. Este evento alternativo ofrecería un calendario de partidos de alto nivel para estos equipos, que de otra forma tendrían que conformarse con amistosos de menor perfil durante la Copa del Mundo. Además del beneficio deportivo, generaría una inyección económica por patrocinios y derechos de televisión.

Sin embargo, el proyecto ruso no está exento de implicaciones políticas y éticas. La participación en un evento organizado por un país vetado por la FIFA podría generar tensiones. Las federaciones invitadas deberán sopesar cuidadosamente los beneficios deportivos y económicos frente a las posibles consecuencias diplomáticas o las reacciones de los organismos rectores del fútbol mundial, quienes podrían interpretar este torneo como una competencia directa al certamen oficial.

Mundial esperando por aprobación de la FIFA

Aunque la clasificación al Mundial FIFA 2026 sigue siendo la prioridad, la propuesta rusa ha abierto un debate sin precedentes. La materialización de este Mundial paralelo representa una jugada audaz de la RFU para reafirmar su presencia global, y el destino de selecciones como la peruana, si no logran clasificar, podría quedar ligado a este inesperado y controvertido torneo alternativo.

DATOS CLAVE

  • Rusia, a través de su Federación de Fútbol (RFU), planea una Copa Mundial alternativa.
  • Este torneo paralelo estaría dirigido a selecciones que no clasifiquen al Mundial FIFA 2026.
  • La RFU, liderada por Alexander Dyukov, considera invitar entre 8 y 12 selecciones.